Cuestionar la Deuda: premisa para democratizar la economía
RESOLUCION DEL CONGRESO DE ANTICAPITALISTAS
El capitalismo contemporáneo ha sumado, para proseguir su avance, nuevas contradicciones. Fruto de una larga política de huida hacia adelante que, primero, financiarizó la economía y, segundo, socializó las deudas privadas, acarreamos volúmenes insostenibles e impagables de deuda, principalmente privada, pero cada vez más pública.
Desde mediados de los 90, la sucesión de burbujas condujo a una enorme inestabilidad, resultado de una hipertrofia financiera y crecimiento formidable de capital ficticio, que algún día estaban llamadas a estallar. A partir de 2007, la crisis trajo consigo el agotamiento de este modo de desarrollo extravagante. Junto a un nuevo descenso de la tasa de beneficio los costes financieros se elevaron hasta tal punto que la tasa de ganancia efectiva se resintió, inaugurando una espiral de recesión, estancamiento y, finalmente, deflación.